Ciclo
Saturno-Urano
“…André
Barbault le da, a este ciclo, una dimensión económica, concretamente referida a
la circulación monetaria. Incluso establece un paralelismo, en su ciclo, al
célebre ciclo económico de Kondratiev, de unos 45 años de duración. Este ciclo
está relacionado, en astrología mundana, con el bloque capitalista, capitaneado
por la locomotora estadounidense.
De esta
manera, no es de extrañar que a finales de 2008, cuando se materializó el
aspecto inarmónico entre ambos planetas (Saturno 180º Urano), los Estados
Unidos se encontraron en el epicentro de una crisis financiera y económica de
gran calado, y fue el momento en que muchas voces críticas a nivel mundial se
alzaron en contra de las prácticas y abusos capitalistas, que han forzado en
exceso la normativa y las leyes en provecho de unos pocos privilegiados…” (Fuente:
Juan Estadella)
Para Venezuela,
que pudiera significar?
El
ciclo vigente Saturno/Urano comenzó el 18 de octubre de 1988, dos meses antes
que ganara las elecciones presidenciales por segunda oportunidad Carlos Andrés Pérez.
Posteriormente en Febrero de 1989 fue el famoso “Caracazo” que dio pie a los
posteriores golpes fallidos de estado del 4 de Febrero de 1992 y del 27 de
Noviembre del mismo año. Tuvo su efervescencia el diciembre del 98, donde gano
las elecciones Hugo Chavez Frías, dando inicio a una nueva visión de la economía
del país, “La Venezuela socialista y bolivariana”. Al menos en los papeles se
pretende cambiar el centro de la economía capitalista que radica en la moneda
(el dólar) por un centro donde el hombre como tal es lo preponderante. En principio
es la teoría marxista - leninista.
Aunque
muy en lo personal, se trata de un capitalismo de estado con lenguaje
populista.
El
ciclo Saturno/Urano para Venezuela sustenta posiblemente esta apreciación cuando
se observa que esta conjunción universal está en la cúspide de la casa II – Sagitario,
dispuesta por Júpiter ubicado en la casa VII donde se alojan los enemigos del
pueblo. Se pudiera interpretar como “meter
las manos en el bolsillo del pueblo (casa II), quitándole sus oportunidades
naturales de obtener sus propios recursos a través de leyes y contratos (casa
VII-convenios cambiarios y controles de cambio, por ejemplo). Todo se decreta,
todo se legisla a conveniencia.
Esta
manera de ver las cosas pudiera tener un giro hacia el 2033 cuando ocurra el
siguiente ciclo. Mientras tanto, esta configuración tendrá sus fase (creciente,
cima, menguante y fin).
En el
2010, inicios del 2011, se llegó a la culminación, algo así como la fase de
luna llena aplicada a este ciclo. De allí en adelante viene el declive.
Coincide precisamente con la enfermedad y posterior muerte del líder que la
llevo a la práctica.
Ayer 10 de febrero, se firmó un convenio cambiario más, en
esta oportunidad es el SIMADI (Sistema marginal de divisas). Qué repercusiones en
la política económica del país pudiera tener este convenio?.
Veamos
los atacires del mismo en el ciclo Saturno/Urano:
El
atacir del Sol en quincucio aplicativo al punto primario (conjunción SAT/URA) y
opuesto al ascendente, mientras que la Luna conjunta al Medio Cielo haciendo
por atacir un trígono a la conjunción.
Los
atacires del Sol implican tensión, estrés, posición opuesta al querer del
pueblo. El quincucio pone al pueblo en una posición donde por su propia cuanta
no puede hacer nada (el siguiente aspecto entre ambos es una oposición). No hay
dólares o no hay bolívares para comprarlos, y se siente maniatado.
En
cuanto a la Luna, indicador de la parte emocional, da rienda suelta a la transitoriedad
de la moneda. Esta luminaria representa
lo cambiante. El trígono permite con facilidad que ocurran.
Es un
control de cambio sin control. Y como es eso?
Se
controla la tenencia de dólares y el flujo de los mismos, pero la relación dólar/bolívar
puede variar todos los días sin control dependiendo del juego de la oferta y la
demanda.
Hasta
cuando este berenjenal?
Los índices
cíclicos de Barbault indican que serán después del 2021. El refundamiento del
capitalismo más socializado donde hombre y capital tengan el peso que le
corresponda a cada quien, donde todos tengan las mismas oportunidades, pero el esfuerzo
de cada quien sea correspondido en la medida de su trabajo. Un estado no
proteccionista ni paternalista, es el sano equilibrio de la sociedad, si bien
el más pudiente aportara más capital vía impuestos por ejemplo, el menos
pudiente aportara su trabajo digno y confortable. Parece utópico, pero ya
existen países donde está empezando a funcionar como Suecia, Noruega,
Dinamarca, Finlandia, por mencionar algunos.
Es el
socialismo del siglo XXI, uraniano de la era de Acuario, no el mal llamado así
en Venezuela y algunos países latinoamericanos.
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